Confirman cierre de la cárcel para migrantes El Bibby Stockholm en enero de 2025
Se tomó la decisión de no renovar el contrato con la cárcel flotante para migrantes conocida como El Bibby Stockholm, por lo que se ha ordenado su cierre para el próximo mes de enero del año 2025.
PORTLAND, Reino Unido.- El gobierno laborista de Keir Stamer ha dado a conocer que se tomó la decisión de no renovar el contrato con la cárcel flotante para migrantes conocida como El Bibby Stockholm, por lo que se ha ordenado su cierre para el próximo mes de enero del año 2025, y desalojará a sus casi 400 ocupantes.
La llegada del Bibby Stockholm al puerto de Portland el año pasado estuvo envuelta en controversias desde el primer día. El Gobierno del exprimer ministro, Rishi Sunak, se vio obligado a desalojar la embarcación a mediados de agosto, apenas cuatro días después de la llegada de los primeros ocupantes, tras detectar la bacteria de la legionela en los circuitos internos de agua.
Este incidente levantó las preocupaciones sobre la idoneidad de la barcaza para alojar a personas en espera de la tramitación de sus solicitudes de asilo.
Pocos meses después del que se llevar a cabo la evacuación inicial, el ministerio del Interior confirmó la muerte de Leonard Farruku, un joven albanés de 27 años, quien presuntamente se quitó la vida en una de las duchas de la embarcación.
Este trágico suceso intensificó las críticas hacia el proyecto, con organizaciones de derechos humanos denunciando las malas condiciones a bordo y el impacto negativo en la salud mental de los ocupantes.
El Bibby Stockholm
El Bibby Stockholm es una barcaza construida para ser utilizada como alojamiento flotante. Originalmente, estas embarcaciones se empleaban para proporcionar vivienda temporal en situaciones donde el espacio en tierra firme era limitado o costoso. A lo largo de los años, ha sido utilizada en diversos contextos, incluyendo el alojamiento de trabajadores en proyectos de construcción y otras labores temporales.
En el año 2023, el Bibby Stockholm fue adquirido por el Gobierno del Reino Unido con el propósito de alojar a solicitantes de asilo mientras se tramitaban sus solicitudes. Esta medida fue parte de una serie de políticas implementadas por el Gobierno conservador del entonces primer ministro, Rishi Sunak, en un intento por gestionar la creciente cantidad de solicitudes de asilo en el país.
Desde su concepción, el proyecto de la barcaza fue fuertemente criticado, ya que las organizaciones de defensa de los derechos humanos y los solicitantes de asilo señalaron las malas condiciones de vida en la embarcación, describiéndola como inadecuada y perjudicial para los residentes.