Síguenos

Escándalo en Bolivia: Evo Morales es acusado de violación

El exmandatario de Bolivia, Evo Morales, acusó al Gobierno de Luis Arce de intentar extraditarlo a EE. UU., revelando que enfrenta cuatro procesos legales en su contra. Uno de ellos, por pedofilia.

Por: Reynol González

COCHABAMBA, Bolivia.- El expresidente de Bolivia, Evo Morales, hizo explosivas declaraciones en su primera rueda de prensa desde que salió a la luz una acusación de violación en su contra. Durante la conferencia, celebrada en Cochabamba, el exmandatario afirmó que hay cuatro procesos judiciales abiertos en su contra y que el actual Gobierno de Luis Arce busca extraditarlo a Estados Unidos.

Ver nota:
Evo Morales acusa a Arce de orquestar 'autogolpe' y engañar al pueblo

Causas de los procesos legales contra Morales

Morales, quien ocupó la presidencia entre 2006 y 2019, argumentó que estas acciones legales comenzaron a surgir justo después de su marcha en septiembre. “Luego de la Marcha para salvar Bolivia, activaron de forma simultánea 4 procesos penales para buscar mi aprehensión, pues creen que enviándome a la cárcel, callarán la voz de un pueblo, subrayó, refiriéndose a la marcha que organizó junto a miles de seguidores, recorriendo 187 kilómetros hasta llegar a La Paz.

En la conferencia, el líder del Movimiento al Socialismo (MAS) hizo hincapié en que su reciente marcha fue un acto legítimo de protesta. Al llegar a la sede del Gobierno, Morales le advirtió a Arce que si desea continuar en el poder, debe reemplazar a varios ministros que, a su juicio, no están cumpliendo con sus responsabilidades.

Desde el Gobierno, se ha interpretado esta acción como un intento por parte de Morales de debilitar el mandato de Arce. Además, el exmandatario insinuó que el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, está sugiriendo su salida del país, lo que él relacionó con la situación de su exjefe antidrogas, Maximiliano Dávila, quien enfrenta un requerimiento de extradición por narcotráfico.

Graves acusaciones sobre la 'Generación Evo'

El caso más alarmante en el que está involucrado Morales implica una acusación de violación a una menor de 15 años, así como la supuesta creación de una red de jóvenes conocida como 'Generación Evo', con el fin de mantener el control durante su gobierno. Este escándalo fue puesto en el centro de atención tras la denuncia de la fiscal departamental, Sandra Gutiérrez, quien fue destituida de su puesto tras intentar hacer público el caso.



Ver nota:
Evo Morales acusa al Gobierno de Arce de desatender demandas sociales en Bolivia

Morales niega las acusaciones de 2020 reactivadas

Morales argumentó que este caso data de 2020 y fue reactivado durante el breve Gobierno interino de Jeanine Áñez, asegurando que ya había sido investigado y desestimado por la Fiscalía. “No hay pruebas en mi contra”, insistió, recordando que ya fue sometido a un proceso que concluyó sin acusaciones.

Además de esta grave acusación, Morales enfrenta otros procesos relacionados con la marcha que encabezó, incluyendo instigación pública a delinquir, daños a la infraestructura caminera, y la utilización de un vehículo de lujo vinculado a un narcotraficante. “En Bolivia, no tengo libertad ni de expresión ni de movimiento”, lamentó.

Críticas de Morales al gobierno por buscar silenciarlo

Posteriormente, a través de la red social X, el exmandatario expresó su descontento con el Gobierno de Arce, acusándolo de intentar proscribir al MAS y de inhabilitar a sus principales adversarios. Esta campaña sucia y mentirosa, tiene el objetivo de anular políticamente cualquier opción electoral que represente una alternativa para salir de la crisis económica, afirmó.


La relación entre Arce y Morales ha sido tensa desde hace tiempo, marcada por la lucha por el control del MAS y la candidatura presidencial para las próximas elecciones. Ambos líderes se culpan mutuamente por la crisis económica que vive Bolivia, que se manifiesta en la falta de dólares y el aumento de precios en productos básicos.

Ver nota:
Evo Morales critica despliegue militar en Bolivia por crisis de combustibles

La situación actual plantea un futuro incierto tanto para Morales como para el Gobierno de Arce, con elecciones a la vista y un clima de polarización política en el país. El exmandatario busca sortear estos obstáculos legales y políticos, de lo contrario se enfrentará a consecuencias más severas en su camino.