Salud de Biden en debate: chequeos médicos verbales y especulaciones
Joe Biden enfrenta escrutinio público por su rutina de salud, al revelarse que se somete a chequeos médicos verbales dos veces por semana, sin realizarse análisis físicos desde su debate con Trump.
WASHINGTON, Estados Unidos.- Tras revelarse que el presidente estadounidense, Joe Biden, se somete a chequeos médicos verbales dos veces por semana, continúa el debate sobre la transparencia y la salud del mandatario, especialmente desde su controvertido debate con Donald Trump a finales de junio.
Ver nota:
Biden ironiza sobre su edad y promete esperanza en evento en Filadelfia
Desde la Casa Blanca, se ha confirmado que Biden realiza estos chequeos de forma regular, mientras ejerce físicamente, como parte de un protocolo que no incluye exámenes físicos completos desde febrero. La portavoz Karine Jean-Pierre aseguró que estos chequeos se realizan de manera rutinaria para monitorear la salud del presidente, quien recientemente ha enfrentado rumores y especulaciones sobre su condición física y mental.
El incidente del debate con Trump exacerbó las preocupaciones públicas, inicialmente atribuidas a un fuerte resfriado y fatiga por los viajes internacionales y la preparación intensiva para el evento. A pesar de los desmentidos, la falta de un examen físico completo desde hace meses ha generado críticas sobre la transparencia de la información médica del presidente, especialmente en un contexto político tan polarizado.
Jean-Pierre subrayó que Biden ha consultado a un neurólogo en tres ocasiones durante su mandato, buscando disipar rumores sobre posibles condiciones de salud más serias como el Parkinson, enfatizando que no recibe tratamiento ni medicación para esta enfermedad.
Niegan alguna inquietud de la OTAN sobre Biden
En medio de estas revelaciones, la Casa Blanca también se prepara para la cumbre conmemorativa del 75 aniversario de la OTAN, donde se espera que Biden juegue un papel central. Los aliados han expresado entusiasmo por el evento, que se enfocará en el apoyo a largo plazo a Ucrania frente a la agresión rusa, aunque se han disipado preocupaciones sobre la capacidad de Biden para liderar estas discusiones.
John Kirby, portavoz de la Casa Blanca, enfatizó que los aliados están comprometidos con la alianza transatlántica y confían en la capacidad de Biden para manejar la diplomacia internacional. A pesar de las críticas y dudas internas, la presencia confirmada de líderes mundiales en la cumbre subraya la percepción global del liderazgo estadounidense bajo la administración actual.
En el ámbito doméstico, la salud de Biden sigue siendo un tema candente entre los críticos y partidarios, quienes buscan claridad sobre los procedimientos médicos del presidente y su impacto potencial en las decisiones políticas y diplomáticas. A medida que avanzan los preparativos para la cumbre de la OTAN, las expectativas y la vigilancia sobre la salud y el desempeño de Biden están en su punto más alto, reflejando las tensiones políticas y estratégicas a nivel global.
Ver nota:
Congresistas demócratas exigen la renuncia de Biden
La próxima semana promete ser crucial para la administración Biden, con desafíos internacionales y debates continuos sobre la transparencia y la salud del presidente en el centro del escenario político estadounidense y mundial.
Fotos: EFE