8M en CDMX: las conmovedoras historias en torno a la marcha
Detrás de cada participante, hay un relato que toca el corazón
CIUDAD DE MÉXICO, México.- Miles de personas participaron en la marcha por el Día Internacional de la Mujer este 8 de marzo, pero detrás de cada una de ellas, hay una historia… Familiares, amigas, compañeras, incluso sobrevivientes de algún tipo de violencia, marcharon hasta el Zócalo capitalino para hacer escuchar su voz y volver a exigir justicia.
En la marcha no solo participaron mujeres de todas las edades: también lo hicieron hombres e incluso niños.
En uno de los contingentes participó el señor José Luis Castillo, padre de Esmeralda Castillo Rincón, quien desapareció hace 15 años en Ciudad Juárez, Chihuahua.
Como cada año desde el 2019, el señor Castillo se unió a la megamarcha de la capital del país para exigir justicia por su hija, quien tenía 14 años de edad cuando no volvió a saber nada de ella.
La última vez que se vio a Esmeralda Castillo Rincón, fue en el cruce de las calles Rafael Valverde y Vicente Guerrero en la colonia Centro en Ciudad Juárez, Chihuahua. Desde ese momento, su padre no ha dejado de buscarla.
Con un ramo de flores en la mano y una manta con el rostro de su hija y la frase “no me olviden, falto yo” sobre el cuerpo, el señor Castillo denunció que en el 2023, las autoridades han querido “volver a desaparecer” a su hija, al eliminarla de la lista de desaparecidos.
“Así como han borrado a Esmeralda, han borrado a miles y miles de desaparecidos. No permitamos que a nuestros desaparecidos los vuelvan a desaparecer”.
“Por eso que estoy nuevamente aquí en Ciudad de México, agradeciéndole a todas ustedes, a todas las mujeres valientes que no se callan, aún ante las circunstancias de la vida…. ¡Porque vivos se los llevaron!. arengó el señor Castillo, a lo que decenas de mujeres que lo rodeaban le contestaron
¡Vivos los queremos!.
“Esmeralda, hermana, aquí está tu manada.. Esmeralda, hermana, aquí está tu manada”, fue el griito que unió todas las voces presentes.
Otro de los momentos emotivos, fue con la presencia de algunos contingentes en el Zócalo capitalino, en donde cientos, miles de mujeres se unieron en una sola voz para exigir justicia por las víctimas de feminicidio y por la aparición de todas aquellas mujeres que no volvieron a casa.
Mientras tanto, algunas mujeres colocaron en el asta del Zócalo, una bandera con los colores de México y un puño en alto, el símbolo de la lucha feminista, como el escudo nacional.
Esta acción ocurrió luego de que el gobierno federal decidiera no colocar la bandera nacional en el asta del Zócalo, como todos los días, y en donde el Palacio Nacional permanece amurallado.
Por otra parte, cientos de mujeres pegaron la fotografía o los nombres de sus agresores en las vallas metálicas colocadas en los monumentos o edificios, para exigir a las autoridades justicia.
Pero las redes sociales también han servido para alzar la voz y exigir castigo a sus agresores, se trate de quien se trate. Es el caso de la cantante y conductora de radio y TV, Analu Salazar, quien a través de su cuenta de Twitter, denunció la violación de la que fue objeto por parte de un cura integrante de los Legionarios de Cristo, cuando ella tenía 8 años.