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Tramo de Puebla de la autopista México-Veracruz, el más peligroso del país

La autopista México-Veracruz, en su tramo de 120 kilómetros que cruza Puebla, es considerada la más peligrosa del país.

Por: Carlos Moreno

PUEBLA, Puebla.- Son 300 kilómetros de longitud de la autopista México-Veracruz, pero el tramo de 120 kilómetros de esa vialidad que cruza por el estado de Puebla es el más peligroso del país.

Tan solo en el primer semestre de este año, en el tramo entre las casetas de cobro de San Martín Texmelucan, Amozoc y Esperanza, que cruzan de extremo a extremo la entidad poblana, se cometieron 4,696 asaltos al transporte de carga y a particulares, de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Ninguna otra carretera mexicana presenta este nivel de incidencia. Hasta el momento, ni la Guardia Nacional ni la Policía Estatal de Puebla, así como tampoco sus pares en los estados de México y Veracruz, han podido establecer una coordinación efectiva para contener los asaltos y a los grupos delictivos que operan en la región.

A 80 kilómetros de distancia de la Ciudad de México en dirección a Puebla, sobre el tramo sinuoso de Río Frío, los delincuentes suelen usar “ponchallantas”, es decir, artefactos con clavos que inevitablemente provocan daño en los neumáticos, obligando a los automovilistas a detenerse, tras lo cual son asaltados.

La peligrosidad de este tramo llamó aún más la atención cuando, en agosto pasado, la diputada federal poblana Blanca Alcalá Ruiz padeció un “secuestro exprés”, luego de que su vehículo cayó en un “ponchallantas”, lo que la obligó a detenerse.


Tras ser bajada de su auto, junto con su personal de apoyo, y después de ser retenida durante más de 7 horas en un paraje junto con otras víctimas, finalmente pudo ponerse en contacto con sus familiares. La legisladora poblana relató que no fue agredida físicamente, pero sus cuentas bancarias fueron vaciadas desde las tarjetas de crédito que le despojaron.

La autopista a Veracruz se torna aún más peligrosa 50 kilómetros más adelante, cruzando la caseta de cobro de Amozoc, donde comienza el conocido localmente como “triángulo rojo”, que es la zona del centro del estado de Puebla donde se ordeñan ductos de gasolina de Pemex y se asaltan camiones del transporte de carga federal.

Tan solo en los primeros meses del año, Pemex detectó 230 tomas clandestinas en ductos que cruzan por la entidad poblana, de las cuales 82 fueron detectadas en el “triángulo rojo”.