¿De verdad los refrescos de dieta hacen menos daño que los normales?
Durante los últimos años se ha puesto de moda el consumo de refrescos en presentaciones light o bajas en calorías, es por ello que te diremos si existen grandes diferencias entre cada una.
CIUDAD DE MÉXICO, México.- Durante los últimos años se ha puesto de moda el consumo de refrescos en presentaciones light o bajas en calorías, sin embargo, algunas personas tienen la idea de que no existe ninguna diferencia respecto a las versiones normales, las cuales contienen azúcar. Es por ello que, te daremos a conocer todo lo que debes de saber respecto a si existen grandes diferencias entre una presentación y otra y cual es menos dañina.
¿De verdad los refrescos de dieta hacen menos daño que los normales?
Es bien sabido que los refrescos en presentación normal cuentan con una gran cantidad de calorías y azúcar, lo que se traduce en algo perjudicial para la salud de quienes lo consumen. Es por esto que si buscas una alternativa para beber tu gaseosa favorita puedes optar por buscarla en su versión light o baja en calorías, de esta manera, podrás seguir disfrutando de su sabor sin perjudicar tu cuerpo al beberla, puesto que no es para nada un misterio que el azúcar es el causante de una de las enfermedades más mortíferas como lo es la diabetes.
¿Cuál es la diferencia entre un refresco normal y uno de dieta?
De acuerdo con Ambito, los refrescos menos perjudiciales para la salud son los que tienen un bajo contenido de azúcares añadidos y no contienen jarabe de maíz de alta fructosa. Además, el consumir de manera frecuente un refresco normal puede desencadenar un sinfín de problemas en una persona, los cuales van desde obesidad, sobrepeso, diabetes, hipertensión y en el peor de los casos puede provocar un paro cardiorrespiratorio.
¿Cuál es la mejor opción?
Si eres un gran aficionado a las gaseosas, la mejor opción es que vayas disminuyendo tu consumo paulatinamente hasta que lo elimines por completo, y esto lo puedes hacer mediante los refrescos de dieta, ya que pueden ayudarte a que tu organismo no recienta de inmediato el hecho de que le quites algo a lo que ya está acostumbrado. No obstante, también se puede sustituir mediante otras bebidas como el té, el agua de fruta natural y el agua simple.