Día Mundial de la Salud Mental: 3 recomendaciones para tener paz en el trabajo

CIUDAD DE MÉXICO.- El Día Mundial de la Salud Mental es una fecha organizada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), la cual se conmemora cada 10 de octubre con el que se busca crear conciencia sobre esta área de la salud, así como para difundir conocimientos de forma global sobre tales enfermedades.

En ese sentido, y como lo marca el Instituto Nacional de Salud Pública, la información estadística sobre salud mental 'es escasa'. No obstante, existen datos que pueden ser relevantes, como los presentados por el INEGI, que, para 2023, registró que hubo 8837 suicidios en el país. Dicha cifra, desde 1994, ha aumentado exponencialmente.

Asimismo, el Instituto Nacional de Salud Pública, a través de su Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Continua 2022 (ENSANUT Continua 2022), registró que el 7.6% de la población adolescente y 7.7% de la población adulta en México han tenido pensamientos suicidio. A este dato, se suma que las mujeres adolescentes y adultas señalaron tener mayor prevalencia (10.2%) que los hombres (9.1%).

Adicionalmente, 16.7% de los adultos en México señaló tener sintomatología depresiva, cuyo dato aumenta en los adultos mayores detectado en 38.3%, frente a los adultos que lo presentaron en el 11.3%. A la vez, la prevalencia depresiva se presentó en mujeres, en adultos con índice de bienestar bajo y en adultos mayores residentes del área rural.

Frente a este escenario, Instituto Nacional de Salud Pública sostuvo que, con base a su ENSANUT Continua 2022, detectaron un incremento en la tendencia de la prevalencia de la conducta suicida a nivel nacional, especialmente en los jóvenes. Es decir, el incremento de suicidios incrementó en más del 600%, conforme al Ensanut 2006, cuando se registró una prevalencia del 1.1%; mientras que el doble de lo expuesto antes de la pandemia de COVID-19, pues en su Ensanut 2018 se mostró una prevalencia del 3.9%.

 

Tres recomendaciones para promover la salud mental en el trabajo

 

Como lo marca la OMS, así como las escuelas, los espacios de trabajo son lugares considerados 'de oportunidades o de riesgo' para la salud mental. Teniendo eso en cuenta, hacer de estos un lugar en el que la salud mental sea un tema de sensibilidad, puede generar dinámicas positivas para toda la estructura laboral, así como para la propia dinámica y flujo de trabajo dentro de una organización.

  

1. Concientización desde los empleadores

A pesar de que la salud mental es un tema sanitario que ocupa la atención, interés e implementación de programas de salud desde los gobierno, a través de legislaciones y reglamentos que proporcionen protocolos sobre 'derechos humanos, trabajo y salud ocupacional', el primero de estos niveles recae en las partes superiores dentro del organigrama de una empresa.

Por tanto, la sensibilización debe ocurrir inicialmente sobre quienes ocupes estos cargos, con el fin de capacitarlos para que cuenten con un ambiente y contexto que pueda promover acciones hacia sus trabajadores. 

Posterior a esto, dentro de los espacios de trabajo habrán de ofrecerse intervenciones institucionales, por medio de especialistas, quienes ofrezcan información y herramientas para concientizarse sobre el tema.

2. Prestar atención de la salud mental de la comunidad de trabajadores

Una vez abierto el tema, uno de los puntos más importantes es hacer que la salud mental deje de ser un tabú. Si bien, expresar este tipo de realidades implica crear espacios donde las personas sea vulnerables, la mejor forma de hacer que estos perduren es ser cuidadosos, responsables y respetuosos con lo que una comunidad comparte.

Así, es posible conocer sobre la salud del otro o, en varios casos, abrir la puerta a que temas de este tipo puedan entrar dentro de las inquietudes de salud de quien ya se encuentre sensibilizado. 

Con ello, también será importante estar al tanto de las dinámicas laborales (que muchas veces pueden derivar en el estrés, uno de los grandes detonantes de enfermedades), así como del estado emocional y mental dentro del grupo que conforma la plantilla de trabajadores, para así promover una cultura de espacio sano de trabajo.

3. Crear oportunidades de trabajo para personas con trastornos mentales

 

Adicionalmente, uno de los pasos importantes para normalizar la salud mental en todos los ámbitos de la vida humana, incluye ofrecer espacios a quienes viven con trastornos mentales.

A pesar de que existen creencias sobre que las personas con enfermedades mentales no pueden ser productivas, lo cierto es que, bajo un control, así como con cualquier enfermedad, pueden desenvolverse en cualquier campo.

Más bien, como lo recaban varias estadísticas, uno de los factores que más suelen dañar la salud mental de las poblaciones es la falta de acceso y oportunidades de trabajo, por lo que la discriminación solo abona a esta situación.

Por ende, los gobiernos y empleadores tienen la responsabilidad de generar más ofertas de trabajo para quienes viven con un trastorno mental, a la vez 'promover y proteger la salud mental de todos los trabajadores'.