Crisis aérea en Venezuela: se suspende el 54% de los vuelos internacionales
Con la suspensión de vuelos internacionales hacia tres países clave, Venezuela enfrenta una caída del 54% en su conectividad aérea, lo que impacta el turismo y la economía.
CARCAS, Venezuela.- Venezuela enfrenta una significativa reducción en su conectividad aérea internacional tras la suspensión de vuelos hacia tres importantes destinos: Panamá, República Dominicana y Perú. Esta medida, vigente desde el 31 de julio, ha impactado fuertemente tanto en la industria aérea como en la movilidad de miles de pasajeros.
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La Asociación de Líneas Aéreas Venezolanas (ALAV) ha confirmado que la decisión, que es vista como una acción política por el gobierno venezolano, ha provocado la pérdida del 54% de los vuelos internacionales que mantenía el país. Antes de la suspensión, se realizaban 181 vuelos semanales hacia diferentes destinos; sin embargo, esta cifra ha disminuido drásticamente a 83.
La presidenta de la ALAV, Marisela de Loaiza, manifestó su preocupación por esta medida, la cual, además de afectar a los pasajeros, ha causado un impacto directo en el sector turístico y en la economía del país.
No solo hemos perdido la mitad de nuestra conectividad internacional, sino que esto también repercute en otras áreas estratégicas del país'.
El gobierno venezolano argumentó que la suspensión responde a una postura en rechazo a lo que consideran 'injerencias' de gobiernos extranjeros en los asuntos internos de Venezuela. El anuncio se dio en el contexto de las críticas recibidas por parte de varios países tras la reelección de Nicolás Maduro en las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio.
Una “suspensión temporal”
Aunque se rumoreaba que la medida sería temporal, hasta finales de septiembre, el Ministerio de Transporte aclaró recientemente que la suspensión no tiene una fecha establecida de término, lo que ha generado más incertidumbre entre los viajeros y las aerolíneas.
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El impacto
La conectividad aérea de Venezuela ya había sufrido un fuerte golpe en los últimos años. Durante la última década, la oferta de vuelos internacionales cayó drásticamente, pasando de 352 frecuencias semanales en 2013 a solo 100 en 2019. Este declive ha sido atribuido a la crisis económica, la imposibilidad de repatriar fondos por parte de las aerolíneas y la pérdida de demanda.
Panamá se había convertido en uno de los destinos más importantes para los venezolanos, actuando como un puente hacia Estados Unidos y otros países de América. De manera similar, Perú servía como una conexión clave con el sur del continente, mientras que República Dominicana ofrecía acceso al Caribe y otras regiones.
Una medida “política”
El impacto de esta suspensión no sólo se refleja en los pasajeros que han tenido que cancelar o modificar sus planes de viaje, sino también en los aeropuertos venezolanos que han visto una disminución en los ingresos generados por estas rutas. De Loaiza advierte que el sector turístico, que comenzaba a recuperarse tras la pandemia, ha sido nuevamente afectado.
La suspensión de vuelos también ha generado preocupación respecto a la posibilidad de una eventual interrupción de la conexión con España, el principal enlace entre Venezuela y Europa. Las recientes tensiones diplomáticas entre ambos países han abierto la puerta a una posible ruptura en las relaciones comerciales y aéreas, lo que podría agravar aún más la situación.
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En medio de este complejo panorama, la ALAV ha instado al gobierno a reconsiderar la suspensión de vuelos y ha advertido que la recuperación de la conectividad perdida no será sencilla, ya que las aerolíneas han reasignado sus aeronaves a otras rutas.
