Tormentas y tornados dejan 11 muertos en Texas, Oklahoma y Arkansas
Al menos 11 personas perdieron la vida en Texas, Oklahoma y Arkansas este fin de semana debido a violentas tormentas y tornados, informaron las autoridades.
NUEVA YORK, Estados Unidos.- Al menos 11 personas perdieron la vida este fin de semana en Texas, Oklahoma y Arkansas debido a las fuertes tormentas y tornados que azotaron la región. Autoridades locales de varios condados confirmaron la cifra de fallecidos y reportaron daños significativos en infraestructura y viviendas.
En el condado de Cooke, Texas, la policía informó el hallazgo de tres cadáveres en una casa en Valley View, cerca de Oklahoma. Las víctimas eran miembros de una misma familia, incluidos dos niños. ''Tenemos cinco víctimas mortales confirmadas, pero lamentablemente creemos que esa cifra probablemente aumente', señaló Ray Sappington, jefe de policía del condado.
Las tormentas dejaron a su paso decenas de viviendas destruidas y miles de personas sin suministro eléctrico. La intensidad de los vientos y la actividad de tornados de hasta 65 kilómetros por hora causaron estragos, especialmente al norte de Dallas, donde el corte de carreteras y los daños en gasolineras y vehículos pesados complicaron la situación.
El Servicio Meteorológico Nacional había emitido alertas de tornados y fuertes tormentas eléctricas para la noche del sábado. Un tornado en la región norte de Dallas no sólo destruyó infraestructura sino que también obligó al traslado aéreo de heridos para evitar los peligros en las carreteras.
Oklahoma también sufrió las consecuencias de las tormentas. Las oficinas del Servicio Meteorológico Nacional en Norman y Tulsa emitieron alertas específicas de tornados, granizo y vientos peligrosos. En Arkansas, la Oficina de Gestión de Emergencias del condado de Boone confirmó la muerte de al menos dos personas, incluida una mujer de 26 años.
La situación sigue siendo crítica en varios estados del sur y centro de EUA, Oklahoma, Arkansas, Kansas, Missouri y Texas enfrentan cortes de energía masivos, afectando a alrededor de 300,000 personas. Los meteorólogos advierten que las condiciones climáticas adversas podrían continuar, por lo que recomiendan mantenerse alerta y seguir las indicaciones de las autoridades.
Las comunidades afectadas están trabajando junto con los equipos de emergencia para evaluar los daños y proporcionar asistencia a los damnificados. La prioridad ahora es restablecer los servicios esenciales y garantizar la seguridad de los residentes mientras se recuperan de esta devastadora serie de tormentas.
