El PRI plantea fortalecer estaciones migratorias en todo el país
Presentará una iniciativa de reformas a la Ley de Migración para garantizar la integridad y el respeto a los derechos humanos de las personas migrantes.
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CIUDAD DE MEXICO.- El Grupo Parlamentario del PRI (GPPRI) plantea garantizar el respeto a los derechos humanos de los migrantes como obligación moral y legal de México, con reformas a la Ley de Migración que fortalezca el funcionamiento de las estaciones migratorias en todo el país.
La iniciativa será presentada durante este periodo de receso legislativo, teniendo como objetivo principal garantizar la seguridad de las y los migrantes y prevenir que sean víctimas de la delincuencia y la explotación a lo largo de su travesía por nuestro país.
De acuerdo a datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), en los últimos años, México ha sido testigo de un aumento significativo en el número de migrantes que cruzan su territorio, lo que ha acentuado la importancia de una gestión adecuada y humanitaria de este flujo migratorio.
Los senadores del PRI aseguraron que 'los migrantes que atraviesan México enfrentan una serie de dificultades que van más allá de los retos del viaje, ya que muchos suelen ser víctimas de la delincuencia y la violencia en su trayecto hacia el norte. Esto incluye asaltos, secuestros, abusos y, además, la mayoría carece de recursos para acceder a servicios médicos, alimentos adecuados o un alojamiento seguro'.
Por ello, la bancada priista, coordinada por el senador Manuel Añorve Baños, propuso reformar los artículos 106 y 107 de la Ley de Migración para que las estaciones migratorias sean espacios dignos y seguros, manteniendo un enfoque humanitario hacia todas las personas extranjeras.
También sugieren que el número de migrantes no supere la capacidad física de la estación migratoria asignada y que en ningún caso se utilicen centros de encarcelamiento, reclusión preventiva o ejecución de sentencias, ni cualquier otro inmueble, como estaciones migratorias.
Además, las estaciones migratorias deberán contar con protocolos de seguridad indispensables para prevenir riesgos, emergencias o contingencias, y garantizar la integridad y el respeto a los derechos humanos de las personas migrantes.