Lo mejor de la información de México y el mundo
Facebook POSTA header X POSTA header Instagram POSTA header Youtube POSTA header TikTok POSTA header
México

Marcha por Ayotzinapa: a una década, el Zócalo de CDMX es testigo de la memoria

Una década ha pasado desde la desaparición de los 43 normalistas y el Zócalo de Ciudad de México se convierte en escenario de una conmovedora marcha para honrar su memoria y exigir respuestas.

Publicado el

Por: Reynol González

CIUDAD DE MÉXICO, México.Este jueves 26 de septiembre de 2024, México recuerda una de las noches más trágicas en su historia: justo el día de hoy, hace 10 años ocurrió un evento que fue llamado la 'Noche de Iguala', cuando 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa desaparecieron en un ataque violento. Hoy, a una década del suceso, la lucha por la verdad y la justicia sigue más viva que nunca.

Ver nota:
Ayotzinapa: a 10 años de la tragedia, aún faltan 43

En la capital mexicana, las primeras luces del día encontraron la ciudad lista para recibir una de las protestas más grandes de los últimos tiempos. El Zócalo, rodeado por vallas metálicas y bloques de concreto, esperaba a miles de manifestantes que, a pesar de los obstáculos, llegaron para conmemorar este doloroso aniversario.


La marcha fue liderada, como cada año, por los padres y madres de los estudiantes desaparecidos. Acompañados de colectivos, sindicatos y estudiantes de todo el país, los familiares avanzaron desde la calle 5 de Mayo, esquivando los bloqueos y el despliegue policial que intentaba contener la manifestación. A pesar de la lluvia, el ánimo no decayó.

Desde la primera hora de la mañana, se notaba una energía especial en el ambiente. Los manifestantes, entre ellos estudiantes de diversas normales rurales y otras instituciones, portaban pancartas, banderas y las ya conocidas imágenes de los 43 estudiantes, que se han convertido en símbolos de resistencia.

La marcha alcanzó su punto álgido cuando los padres llegaron al Zócalo y, entre gritos y consignas, se prepararon para encabezar el mitin central. En sus pechos, los carteles con las fotos de sus hijos desaparecidos, un recordatorio de que, a pesar de los años, la herida sigue abierta y la exigencia de justicia no ha disminuido.

En uno de los actos más simbólicos del día, los padres de los normalistas instalaron un nuevo memorial sobre Paseo de la Reforma. Armados con palas y picos, colocaron las fotografías y nombres de los 43 jóvenes a escasos metros del antimonumento que se ha erigido en su honor desde hace casi diez años.


El antimonumento, con la frase icónica 'Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos', sigue siendo el epicentro de las protestas y el símbolo más visible de una lucha que no termina. La instalación del nuevo memorial busca renovar el compromiso con la causa y recordarle al país que, aunque han pasado diez años, las preguntas siguen sin respuesta.

El caso de Ayotzinapa ha sido uno de los temas más polémicos en los últimos dos gobiernos. Tanto la administración de Enrique Peña Nieto como la de Andrés Manuel López Obrador han prometido esclarecer los hechos, pero hasta ahora, solo se han encontrado restos de tres de los estudiantes desaparecidos. La frustración de las familias es palpable.

Además de la capital, varias ciudades en todo México se sumaron a las protestas. En lugares como Guadalajara, Monterrey y Oaxaca, miles de personas salieron a las calles, uniendo sus voces a la de los padres de los 43. Las pancartas y carteles con los rostros de los estudiantes desaparecidos se replicaron en plazas y calles de todo el país.


La lluvia, que intentó apagar el ánimo de los manifestantes, no logró su cometido. Las familias y organizaciones que participaron en la marcha continuaron bajo el cielo gris, convencidos de que su lucha, aunque dura, debe continuar hasta que la verdad salga a la luz.

El décimo aniversario de la desaparición de los estudiantes de Ayotzinapa es un recordatorio del largo camino que aún queda por recorrer en la búsqueda de justicia en México. A pesar de los obstáculos, el movimiento sigue fuerte y los padres de los 43 jóvenes desaparecidos siguen siendo la voz de una causa que no puede ser silenciada.

Con la mirada fija en el futuro, los manifestantes se retiran del Zócalo, sabiendo que, aunque el tiempo pasa, la memoria de sus hijos y la exigencia de justicia se mantienen intactas.

Comparte esta nota Copiar Liga
URL copiada al portapapeles
Otras Noticias