¿Quiénes son Mario Alberto Ávila y Alexandro Rovirosa, empresarios acusados en Texas por sobornos millonarios en Pemex?
Mario Alberto Ávila y Alexandro Rovirosa, dos empresarios residentes en Texas, fueron señalados por supuestos sobornos a funcionarios de Pemex.

El FBI de Houston y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas informaron sobre una acusación federal contra dos empresarios mexicanos residentes en Texas, señalados por participar en un esquema de sobornos a funcionarios de Petróleos Mexicanos (Pemex) y su filial Pemex Exploración y Producción (PEP).
De acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos, entre 2019 y 2021, Mario Alberto Ávila Lizárraga y Ramón Alexandro Rovirosa Martínez habrían pagado sobornos a funcionarios mexicanos para manipular licitaciones y obtener contratos millonarios con la petrolera estatal.
La acusación fue presentada en el Distrito Sur de Texas y se trata de un caso que, según las autoridades estadounidenses, busca enviar un mensaje contra la corrupción internacional. “El soborno perjudica la competencia justa y no será tolerado”, afirmó José A. Pérez, subdirector del FBI.
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¿Quiénes son los empresarios?
Ramón Alexandro Rovirosa Martínez, de 46 años, es originario de Tabasco y residía en The Woodlands, Texas. Es dueño de varias empresas del sector energético, entre ellas Roma Energy, así como compañías de construcción con sede en el estado sureño. De acuerdo con documentos judiciales, también tendría vínculos con miembros del crimen organizado en México, aunque esto no ha sido confirmado oficialmente.
Mario Alberto Ávila Lizárraga, de 61 años, es originario de Campeche y reside en Spring, Texas. Tiene una larga trayectoria en el sector público: fue delegado de la Sedesol en Campeche, subdirector de Mantenimiento y Logística en PEP y en 2009 compitió por la gubernatura del estado con el partido PAN.
En 2015, la Secretaría de la Función Pública lo inhabilitó por 10 años debido a irregularidades relacionadas con contratos a la empresa Oceanografía, incluyendo el uso indebido de aeronaves privadas y la firma de adendas fuera de tiempo.
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¿De qué se les acusa?
Según la acusación formal, Ávila y Rovirosa conspiraron para pagar al menos 150 mil dólares en sobornos a funcionarios de Pemex y PEP. Estos pagos incluían artículos de lujo (como relojes de alta gama y productos de Louis Vuitton), dinero en efectivo entre otros beneficios. A cambio, los funcionarios facilitaron la obtención y retención de contratos para empresas vinculadas con Rovirosa, que representaron ganancias de al menos 2.5 millones de dólares.
Ambos empresarios enfrentan un cargo de conspiración para violar la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA) y tres cargos sustantivos adicionales por violar esta misma ley. De ser encontrados culpables, podrían recibir hasta cinco años de prisión por cada cargo.
Hasta el momento, Rovirosa ya compareció ante un juez federal, mientras que Ávila permanece prófugo.
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