Coahuila reconoce las deepfakes sexuales en Código Penal, ¿qué es este delito?
A partir de ahora, en Coahuila se castigará a quien altere, edite o manipule imágenes, videos o identidades digitales, utilizando cualquier tecnología.
El Congreso del Estado de Coahuila dio un paso relevante en la actualización de su marco legal al incorporar el delito de deepfakes al Código Penal, con el objetivo de proteger a las personas frente a nuevas formas de violencia digital que han crecido con el uso de la Inteligencia Artificial.
La reforma fue aprobada por unanimidad y responde a una preocupación cada vez más presente, especialmente entre jóvenes y adolescentes, la manipulación de imágenes, videos o audios con fines de daño personal.
La iniciativa fue impulsada por la diputada Blanca Lamas, quien subrayó que estas prácticas pueden causar afectaciones graves al honor, la reputación y la privacidad de las víctimas, además de generar un daño emocional difícil de revertir.
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¿Qué son las deepfakes y por qué representan un delito?
Las deepfakes, también conocidas como “falsedades profundas”, son archivos de video, imagen o audio creados o alterados mediante Inteligencia Artificial para simular de forma convincente la identidad de una persona. A través del aprendizaje profundo, estos materiales logran engañar al ojo y al oído humano, haciéndolos parecer auténticos.
Aunque esta tecnología existe desde finales de los años noventa, ganó notoriedad en 2017, cuando comenzaron a circular videos falsos, muchos de ellos de contenido íntimo, utilizando los rostros de personas reales sin su consentimiento.
Desde entonces, expertos advierten que las deepfakes se han convertido en una evolución peligrosa de las noticias falsas, al facilitar la desinformación y la manipulación social.
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¿Cómo sanciona Coahuila el uso de deepfakes en el Código Penal?
La reforma modifica la fracción IV del artículo 236 del Código Penal, relacionada con el acoso y la privacidad sexual.
A partir de ahora, se castigará a quien altere, edite o manipule imágenes, videos o identidades digitales, utilizando cualquier tecnología, con el propósito de exhibir a una persona en situaciones íntimas o sexuales y causarle daño.
Las sanciones contemplan penas de tres a seis años de prisión, además de multas económicas, cuando estos contenidos se difundan para provocar descrédito público o afectar la dignidad de la víctima. La ley también contempla la falsificación de perfiles o identidades como parte de este delito.
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¿Por qué esta reforma es clave contra la violencia digital?
Durante la exposición de motivos, la diputada Blanca Lamas advirtió que el impacto del acoso digital se amplifica debido a la rapidez con la que estos contenidos pueden difundirse en redes sociales, muchas veces desde el anonimato, y lo complicado que resulta eliminarlos por completo.
La legisladora destacó que esta iniciativa surgió del trabajo conjunto con integrantes del Parlamento Juvenil 2024, quienes expresaron su preocupación por los riesgos que enfrentan las nuevas generaciones en entornos digitales.
¿Qué otras reformas aprobó el Congreso junto al delito de deepfakes?
Además de tipificar las deepfakes, el Congreso de Coahuila también aprobó sancionar la cohabitación forzada, una práctica que persiste en algunas comunidades pese a la prohibición del matrimonio infantil.
Este nuevo delito castigará a quien obligue o induzca a una persona menor de edad a vivir en unión informal, con penas que van de ocho a quince años de prisión, incrementándose cuando la víctima pertenezca a comunidades indígenas o afromexicanas.
