Muere Alain Delon, estrella del cine francés, a los 88 años en su residencia
El icónico actor francés Alain Delon, conocido por su carisma y papeles inolvidables, falleció a los 88 años en su hogar en Douchy, Francia, rodeado de su familia.
DOUCHY, Francia.- Alain Delon, considerado uno de los rostros más representativos del cine europeo, ha fallecido a los 88 años en su residencia en Douchy, Francia. El actor, famoso por su enigmático atractivo y su dominio de personajes duros, deja un legado imborrable en la historia del cine. Su familia, a través de un comunicado, ha pedido privacidad en este momento de duelo.
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Su estilo
Conocido por su estilo inimitable y su magnetismo en pantalla, Delon se convirtió en una estrella internacional gracias a películas como El samurái y Borsalino, donde su presencia enigmática y su carácter de tipo duro dejaron una marca indeleble. Su carrera despegó en los años 60 con éxitos que lo catapultaron a la fama, convirtiéndose en un referente del cine de la época.
En sus últimos años deseaba morir
El actor, que en 2019 sufrió un derrame cerebral y había estado luchando contra otros problemas de salud, vivía recluido en su mansión, rodeado de su familia y de su fiel perro, Loubo. Fue durante esa misma época cuando recibió la Palma de Oro honorífica en el Festival de Cannes, en un emotivo homenaje que muchos interpretaron como su despedida del cine.
En 2022, diversos medios franceses reportaron que el legendario actor habría solicitado la eutanasia tras enfrentar serios problemas de salud. Esta decisión habría sido motivada por los dos accidentes cerebrovasculares que sufrió en los últimos años, lo que deterioró significativamente su calidad de vida.
Además de las complicaciones derivadas de estos accidentes, se supo que Delon fue diagnosticado con un linfoma de células B, un tipo de cáncer que, según reveló su hijo Anthony hace más de un año, marcó un nuevo desafío en la vida del actor. Este diagnóstico se sumó a las dificultades de salud que lo mantuvieron alejado de los reflectores y de las apariciones públicas que tanto caracterizaron su carrera.
Desde que sufrió su primer accidente cerebrovascular en 2019, Delon había optado por llevar una vida más reservada en su propiedad de Douchy, Francia. Su retiro gradual del ojo público reflejó la complejidad de su situación médica y su deseo de enfrentar sus problemas de salud en un entorno de privacidad.
Su trabajo con directores de renombre
A lo largo de su carrera, Delon trabajó con grandes directores como Luchino Visconti, Jean-Pierre Melville, y Michelangelo Antonioni, quienes supieron aprovechar su talento y su imponente físico para crear personajes inolvidables. En películas como El gatopardo y Rocco y sus hermanos, demostró su capacidad para interpretar papeles complejos que iban más allá de su imagen de galán.
Aunque su aparición en el cine se redujo en los años 90, Delon siguió siendo una figura central en el mundo del espectáculo. Su vida personal, marcada por romances con figuras como Romy Schneider y Nathalie Delon, también fue objeto de constante interés mediático.
A pesar de haber participado en más de 90 películas, Delon sólo ganó un premio César, el máximo galardón del cine francés, en 1985 por su actuación en Nuestra historia de Bertrand Blier. Su legado, sin embargo, va más allá de los premios, y su influencia en el cine perdura hasta hoy.
Ideología política controversial
Durante los últimos años, Delon generó controversia por sus opiniones políticas y su apoyo al partido de extrema derecha Frente Nacional. Sin embargo, su talento como actor y su contribución al cine europeo son innegables.
Nacido en las afueras de París en 1935, Delon tuvo una infancia difícil tras el divorcio de sus padres. Después de un breve paso por la marina, donde enfrentó problemas disciplinarios, regresó a París y se introdujo en el mundo del cine casi por casualidad, impulsado por su atractivo físico y su mirada penetrante.
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Delon siempre fue un hombre de pasiones intensas, ya fuera en su carrera, en su vida amorosa, o en su afición por el arte y las armas. 'Un héroe siempre debe saber morir', dijo en una entrevista, refiriéndose a su afición por interpretar personajes que encontraban su fin en la pantalla, un reflejo de su filosofía de vida.
