Descubre la laguna que desaparece en Santiago

SANTIAGO, Nuevo León.- La tormenta 'Alberto' trajo intensas lluvias a Nuevo León, llenando por primera vez en 14 años la Laguna de Sánchez, es una laguna que aparece después de cada huracán que azota la región metropolitana de Monterrey y desaparece meses después. Este embalse natural, rodeado por la majestuosa Sierra de Santiago, se transformó en un imán turístico para locales y visitantes que buscan aventuras en la naturaleza.

Cuando supe de este fenómeno, decidí explorar la laguna, que ahora brillaba como un espejo entre las montañas. Con un grupo de amigos, armamos un plan para experimentar las nuevas actividades que el lugar ofrecía.

A nuestra llegada, la atmósfera era festiva. El agua cristalina de la laguna reflejaba el cielo azul, interrumpido solo por las nubes pasajeras que habían traído la tormenta. Había una sensación de renovación en el aire, como si la laguna misma despertara de un largo sueño. En cada rincón, se escuchaban risas y voces emocionadas, mientras las familias y grupos de amigos se preparaban para sus actividades acuáticas.

No perdimos tiempo y alquilamos kayaks para deslizarnos por la superficie tranquila. Remar en ese entorno era como flotar en un mundo aparte, donde el tiempo parecía detenerse. Las montañas circundantes, cubiertas de un verde intenso, nos abrazaban con su majestuosidad. El silencio solo era interrumpido por el suave chapoteo de los remos y el canto de las aves que volaban sobre nosotros.

Después de un rato, decidimos probar una de las balsas disponibles. Diseñadas para grupos, estas embarcaciones eran perfectas para disfrutar en compañía. Remar juntos no solo fortaleció nuestra coordinación, sino también nuestros lazos como equipo. Cada brazada nos acercaba más al centro de la laguna, donde el agua era más profunda y el paisaje aún más impresionante.

Pero no todo fue calma. Unos cuantos aventureros entre nosotros, animados por el ambiente, se lanzaron al agua para un chapuzón. El agua, fresca y revitalizante, nos llenó de energía. Nos reímos a carcajadas viendo a los más atrevidos sumergirse una y otra vez, disfrutando de ese momento irrepetible.

La Laguna de Sánchez, que por años había estado seca, ahora es un símbolo de resiliencia y renovación. Los lugareños, conscientes del regalo que la naturaleza les había dado, comenzaron a promover la laguna como un destino de ecoturismo. Nos encontramos con varios de ellos, quienes ofrecían productos locales, como frutas frescas y dulces tradicionales, enriqueciendo aún más nuestra experiencia.

Al final del día, mientras el sol comenzaba a ocultarse detrás de las montañas, nos sentamos a la orilla de la laguna para disfrutar del atardecer. Los colores del cielo se reflejaban en el agua, creando un espectáculo visual que nunca olvidaremos. Sentados allí, en silencio, comprendimos la magia de este lugar: la combinación de naturaleza, comunidad y aventura había hecho de nuestra visita algo más que un simple viaje, lo convirtió en una experiencia transformadora.

Laguna de Sánchez, resurgida gracias a la tormenta 'Alberto', nos enseñó que la naturaleza siempre encuentra la manera de renovarse, y que en cada rincón de nuestro país, hay historias esperando ser descubiertas, sólo necesitamos andar por esos caminos con los ojos y el corazón abiertos.

Así, mis andares en Laguna de Sánchez que se convirtieron en una experiencia única, disfrutando de la paz que caracteriza a los santiangüenses de la sierra alta, el olor a bosque, y la hipnotizante agua cristalina que duplica en su reflejo a los relieves montañosos que invitan a confundir a la mente pensando que estás en los Alpes suizos.

Está es la bitácora de mis #Andares que iniciaron en la villa del pueblo mágico de Santiago, Nuevo León, subiendo por la famosa Cola de Caballo, pasando por la Ciénega de González hasta llegar a Laguna de Sánchez. Acompáñame en los siguientes Andares y recuerda que solo vivo para ser feliz ¿y tú?